Rocanroles con jícamo
Aviso: este frente común contra la intolerancia no tolerará jamás de nuevo un título sencishito y carismático. Porque? sabe...
La radio sonaba a todo volumen en la azotea del edificio más rimbombantemente miserable de la más rimbombantemente opulenta barriada de la ciudad. Porque se permitia la sociedad semejantes desigualdades, sobre todo en plenos tiempos electorales? Porque la sociedad esta compuesta de átomos y protones y neutrones y fotones y positrones y confitones y la física así es. Medio caprichosita. El locutor anunció: "...yyyyyy acaban ustedes de escuchar, mis amigochos, la más reciente grabación de The Modern Funk-jazz-hip-hop-tex-mex Band: "Tu dialéctica me hace ricacha, mami" Y recuerden, sigan llamando para que participen en nuestra sensacional rifa de los botones de la camisa del archirecontragalan Melesio Melcacho". Dominga apagó el estereo con el pie y se dio vuelta para quedar boca abajo. El hecho de estar encuerada y con la ventana abierta, sabiendo que en el edificio de enfrente, mas de cuatro mozalbetes, daban rienda suelta a sus ansias con una mano, mientras con la otra sostenian el carísimo telescopio o los binoculares, le tenía sin cuidado. Bueno, la excitaba un poquito. Tomo la lata de refresco y se lo terminó. Mecía su cuerpo despacio y sus nalgas enormes, aceleraban el trabajo manual de los muchachitos, eso si, muy monos y educados todos.
"¡Dominga! ¡Dominga! ¡Te habla mi mamá!"
Abrió de sopeton y la imagen de la mujer le paralizó por un momento (tambien lo que te imaginas, solo que más tiempo)
"Que si, que, que dice mi m-m-ma, que di-dice mi ma, que, hmm, que este, que bajes!"
Fernando creyó que al terminar la frase, el momento tenso se disiparía por encanto, lo cual en el fondo, no le emocionaba mucho: la vista era genial. Pero el dilatamiento pupilar (y el otro) no tenian la menor intención de disiparse. Dominga se paró en la cama y, usando el espejo imaginario de cuerpo entero que quebró el otro hijo de la señora, cuando lo iba subiendo y agachandose al mismo tiempo para verle los calzones, empezó a contemplarse, como autoligandose. Sabia de sobra el efecto que estaba produciendo en el baboso de Fernando.
5 comentarios
Daan. -
Oiga amigo Pepensador ¿ Cómo díjimos, dijo que se llama...?
:)
J u l i s s a -
Pero si... en tiempo de calor a uno le da con esas ma~as que se le va a ser! Aunque calentar al vecino... jajaja
Saludos ^^
Azul -
Mil bikos.
Edmundo Dantés -
mixtli -
Realmente hace demasiado calor!!!! en casa, se acostumbra andar en meros cueros, y me encanta acostarme bocaabajo, je aunque procuro cerrar las cortinas...
Un saludo